Dese hace ya mucho tiempo quería compartirles esta deliciosa receta de mi infancia, pero la falta de tiempo es quien siempre se interpone entre algunas cosas que queremos hacer, como dicen por ahí, se le da prioridad a lo "urgente" y no a lo "importante", éste fue el caso, hasta que me decidí dedicarle tiempo a lo importante, y me dí a la tarea de buscar esta preciada receta familiar, he de comentarles que me la había solicitado también una amiga a la que quiero mucho, Rocío, pues resulta que mi madrina de Bautizo era su Suegra, y yo tenía la fortuna de vivir a un lado de ella, así es que muchas cosas me fue enseñando ella en el paso de mi vida y de mi infancia, sobre todo al perder a mi mamá, ella fue uno de los grandes apoyos que gracias a Dios tuve, y aunque no es la receta de mi Madrina, es la de mi Mamá, la cual es muy parecida según recuerdo, por lo que no había mucha diferencia entre una y otra.
En uno de mis recuerdos más tiernos pues verdaderamente estaba pequeña y en el que intervino mi madrina, fue una ocasión en la que en primero de Primaria fui la afortunada Ada de la Primavera en el festival del colegio, mi mamá se dio a la tarea de ponerme un hermoso vestido largo y claro, en realidad es lo que recuerdo, pero mi madrina, quien además era una gran pintora, fue la encargada de hacer mi barita mágica de ada, una estrella, le quedó hermosa, y recuerdo que momentos antes de partir al festival me pidió que fuera a visitarla a su casa, la cual, como ya les conté, se encontraba a un lado de la mía, por lo que fui a que me viera vestida como Ada de la Primavera, y mi sorpresa fue que al darme la barita, le espolvoreó un polvo brillante y me dijo que eran los Polvos de la Primavera, para que despertara a todos los animalitos y las flores crecieran hermosas... al escribir ésto, créanme que se me dibuja una enorme sonrisa en el rostro, no lo puedo evitar... qué recuerdo tan bonito... en verdad los niños se maravillan con todo y todo lo creen, pues yo me fui al festival en mi papel de Ada de la Primavera...
Les quiero contar además que el día que preparé este Rompope, se terminó en un dos por tres, pues le encanta a mi familia, es tan rico y resulta ideal para regalar, así es que se pueden ir preparando con botellas bonitas de vino que vayan desocupando para esta próxima Navidad y les aseguró que será un detalle muy bien apreciado.
Ven el tarrito de monje que se encuentra en la fotografía en la esquina inferior derecha? es precisamente una de las copitas que se utilizaban en casa para servir el rompope, que recuerdos me traen!!
Además les presumo que la hermosa maceta que está detrás, me la hizo mi hija mediana, me encanta ese dibujo tan colorido...
Además les presumo que la hermosa maceta que está detrás, me la hizo mi hija mediana, me encanta ese dibujo tan colorido...
Ingredientes:
2 litros de leche
100 gramos de almendra pelada
600 gramos de azucar
8 yemas
2 cucharadas de fécula de maíz
1 Raja de canela o 1 vaina de vainilla (1 cucharadita de vainilla en su caso) (pueden ser ambas)
1/2 litro de alcohol comestible, NO INDUSTRIAL si no consigues con ron o brandy al gusto (no le pongas uno muy fino, no es necesario.
Procedimiento:
En medio litro de leche ya cocida (en caso de ser bronca) y fría, se mezclan las almendras molidas, les anexo la forma de pelar las almendras, la fécula de maíz y las yemas.
La leche restante se pone al fuego con el azúcar y la vainilla o la raja de canela, lo que hayamos elegido, aunque en verdad pueden agregar ambas, a mi me gusta más, se deja hervir 15 minutos moviendo de vez en cuando para que no se derrame y no se pegue al fondo de la olla.
Se cuela la leche hervida con mucho cuidado para retirarle los trozos de canela; se le incorporan la mezcla de las yemas, fécula y almendras molidas, hay que mover, en ese momento bien para evitar que se peguen las yemas y les resulte huevo revuelto, se debe incorporar todo muy bien.
Se deja hervir a fuego bajo hasta que espese, moviendo constantemente. No se les olvide estar moviendo y moviendo bastante seguido, es una preparación que no se debe de descuidar por ningún motivo.
Para saber que ha espesado, lo ideal es sacar la pala y pasarle con cuidado el dedo, con cuidado porque estará muy caliente, y si se separa fácilmente de la pala y no se vuelve a juntar el líquido estará listo, debe quedar como un atole, cuando ha espesado se apaga el fuego y se mueve para que enfríe y así evitamos que se le forme nata.
Cuando está casi frío el rompope se le agrega poco a poco el alcohol o el brandy o ron, si no conseguimos alcohol apto para consumo, se debe seguir moviendo hasta que esté completamente frío y se envasa en botellas previamente esterilizadas.
Para esterilizar botellas, se ponen a hervir en agua hasta cubrirlas, también colocamos en la olla las tapaderas, cuando hayan hervido de 10 a 15 minutos, se apaga el fuego y se sacan las botellas con mucho cuidado, se ponen a secar sobre un trapo limpio.
Esta receta es en realidad sencilla, pueden variar la almendra y utilizar piñones, nueces, pistache, en fin, si gustan pueden agregarle también un poquito de esencia de almendras, una tapita, es una variante.
Espero que les guste y se animen a preparar este delicioso rompope casero, como el de las monjitas.... les comparto esta receta que es un rico recuerdo familiar con mucho cariño...
No hay comentarios:
Publicar un comentario